FeS-UGT solicita al Ministerio de Justicia y al Colegio de Registradores la búsqueda de un consenso social y laboral para que la función del Registro Civil mantenga sus garantías, para que los ciudadanos no paguemos dos veces por los mismo (impuestos y aranceles), para que la optimización del Registro Civil no suponga la supresión de miles de puestos de trabajo y para que la función y el empleo de los Registros de la Propiedad y Mercantiles sea viable y asumible.
Desde FeS-UGT reiteramos nuestra preocupación por la falta de transparencia con respecto a la ciudadanía y los empleados de los Registros Civiles y de la Propiedad y Mercantiles. La supresión de la gratuidad del servicio público del Registro Civil es impopular y probablemente injustificada; la pérdida de puestos de trabajo, lamentable e ineficaz y la asunción gratuita de funciones, inviable para unos Registros de la Propiedad que -en la actualidad- no cubren los gastos de la gestión propia y que verían incrementados los costes, lo que resulta inasumible. La información aparecida en prensa, que se han hecho eco del avanzado proceso de cesión del Registro Civil, informan de aspectos a tener en cuenta por la ciudadanía y por los empleados de unos y otros Registros.
En este sentido se habla de la gratuidad o no del servicio, de la importante pérdida de empleos en un colectivo y de la probable asunción de hasta un ochenta por ciento de esos empleos por los Registros absorbentes. Desde FeS-UGT -como representantes de los empleados de los Registros de la Propiedad y Mercantiles- reiteramos nuestra preocupación por los efectos de una asunción de nuevas funciones que no se apruebe con el consenso necesario, advertimos que como ciudadanos debemos negarnos ante la supresión de la gratuidad del Registro Civil y como empleados de los Registros de la Propiedad y Mercantiles necesitamos impedir la asunción de funciones que precaricen todavía más el empleo de nuestro colectivo.