El viernes 22 de noviembre finalizó el periodo de negociación del Despido Colectivo impuesto en Tragsatec (4.500 trabajadores) con DESACUERDO, debido a que la empresa se enrocó en mantener 368 despidos.
La postura de la empresa fue inamovible y ninguna de las medidas que se propusieron, consiguieron reducir el número. Ante este resultado del periodo de negociación, desde FeS-UGT estudiaremos la impugnación del procedimiento ante la Audiencia Nacional. Para llegar a estos 368 despidos ya había que hacer un gran sacrificio por parte de la plantilla productiva y además con un reparto claramente desigual:
- Los despidos no afectan a organigrama ni a mandos intermedios. Las últimas reducciones de despidos que ofrecía la empresa se encaminaban a salvar prácticamente a estos colectivos, no reducían los despidos de los trabajadores y trabajadoras directamente productivos.
- Reducción de jornada en una hora diaria con eliminación del ticket restaurant durante dos años, pero recayendo sólo sobre 528 trabajadores y trabajadoras del estrato productivo. Recordad que no afectaba a nadie de organigrama ni a mandos intermedios. Siempre hemos pedido que se implicara a toda la plantilla para que la reducción de jornada y de sueldo fuera menor al repartirla entre todos y todas
- El organigrama se mantiene prácticamente igual, la única medida a aplicar era la movilidad funcional, pero limitada a una bajada de sueldo del 20%. (Comparad con la reducción de jornada que implica un 12,5%)
- Sobre todos los trabajadores y trabajadoras se producía una bajada de sueldo progresiva del 1% cada 10.000 euros de la retribución total, y aplicada solo sobre los conceptos por encima de convenio (complemento personal absorbible, complemento de puesto y similares). Y todo ello con un tope superior destinado a proteger los salarios más altos.
- Muy importante reseñar, que estas bajadas de sueldo que planteaba la empresa no reducían despidos y sólo iban destinadas a buscar beneficios (para repartir entre los de siempre).
- La eliminación del Fondo de Acción Social por dos años era “difícil cuantificar que reduzca despidos”.
- La movilidad geográfica ofrecía una compensación por traslado equivalente al 10% del salario bruto anual del 10% durante dos años. Pero siempre dijeron que esta medida tenía poca posibilidad de aplicación.
- En el caso de Sanidad Animal de Extremadura se ofreció una reducción del 15% de jornada anual durante dos años pero manteniendo 35 despidos. Para poder alcanzar la ausencia de despidos se debería reducir la jornada y el salario un 21%. Todo ello sin ninguna posibilidad de complementar con el paro.
- Para Sanidad Animal de Asturias, la oferta era realizar un ERTE durante dos años con una reducción de jornada del 30% anual.
- Por último, en cuanto las indemnizaciones, no fueron capaces de ponerse por encima de los 20 días que marca la ley, más cuatro días más por adscripción y 5 días más ligados a que el plan de recolocación no fuera exitoso en 6 meses. Es decir, quedarían diferidos durante 6 meses y se perderían si el trabajador o trabajadora encontrara empleo en ese periodo. Todo ello con un límite de 16 mensualidades.
Estas medidas desproporcionadas e injustas en su aplicación (la carga siempre recae en los mismos) y que además no solucionaban para nada las razones económicas, organizativas y productivas llevaron a la representación social de la mesa de negociación unánimemente a no firmar el acuerdo planteado, quedando finalmente por parte de la empresa el planteamiento inicial de 803 despidos.