En nuestra última circular de primeros de abril saludábamos positivamente la intervención de los mediadores del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA), cuya presencia había conseguido cambiar la postura casi autista de nuestros interlocutores patronales.
Reconozcamos, aunque sea por interés y para motivarles, que su posición ha variado y también su actitud. Y así lo hacemos. Aunque todavía la distancia entre nuestras razonables y razonadas propuestas y las que en su momento nos plantearan las patronales es grande, es positivo hablar y discutir, que no mantener la intransigencia o el silencio ante las posiciones de la otra parte.
Las razones que nos mueven a negociar el VI Convenio están escritas y las conocéis:
- Queremos ser actores principales de nuestras condiciones de trabajo, por ello queremos acordar cuanto antes mejoras para que la no ultra actividad del Convenio vigente, como permite la Reforma actual, nos lleve a perder mejoras y condiciones reguladas por el Convenio, y que tuviéramos como referente el E.T. puro y duro.
- Queremos que el sector sea capaz de dar a sus trabajadores estabilidad en el empleo y condiciones de desarrollo profesional y económico razonables. Hoy no es así. La rotación de las plantillas es muy superior al del resto de sectores. Su clasificación profesional, tiene que ver con cuándo el sector regulaba todas las condiciones del trabajador en misión y el de estructura. Es necesario un Convenio que recoja y actualice el recorrido profesional del trabajador de estructura.
- Queremos un sector donde los esfuerzos estén mejor repartidos. La permanencia y desarrollo de sus empresas no se puede realizar sobre las de sus trabajadores. Los trabajadores de estructura han pasado de más de 7.000 en el año 2007, a 5.033 trabajadores en noviembre de 2.012. Sus condiciones económicas apenas han variados desde el año 2010. La solución no puede ser la que se nos planteó por parte patronal, recogida en un Convenio de empresa que se nos ofrecía como ejemplo, ningún incremento salarial en los próximos cinco años, incrementar la jornada hasta las 1.820 horas anuales, y discriminar a los trabajadores de nuevo ingreso con salarios mensuales de 800€.
Porque los ejes de nuestra plataforma recogen los puntos citados, vamos a seguir intentando el acuerdo, que creemos deberá dar satisfacción a los legítimos intereses que el sector tiene, y también a los intereses y expectativas que sus trabajadores requieren. Por nuestra parte, hay voluntad, y todavía, aunque no mucho, tiempo.
Como informábamos en nuestra última circular, nos estamos reuniendo cada semana, habiendo tratado ya la vigencia, ultractividad y estructura, jornada Laboral y permisos, Prevención de Riesgos Laborales y Faltas y Sanciones, Comisión Paritaria de Interpretación, Descuelgue Salarial y Protocolo de Acoso. En esta semana del 29 de abril, estamos intentando consensuar textos de los puntos tratados anteriormente, e ir cerrando los que vayan acordándose para poder llevar avances al Acto de Mediación del día de hoy.
Como os decíamos, las distancias son todavía grandes, pero creemos que el acuerdo es posible, porque insistimos, la actitud es ya muy distinta a la de otros momentos.