El porcentaje de mujeres directivas en España ha bajado tres puntos respecto al año pasado, situándose en el 21% y volviendo al nivel de 2009. El dato de 2013 interrumpe la clara tendencia de incremento de mujeres en ESpaña desde la primera edición del estudio IBR en 2004, sitúa a las directivas españolas por debajo de la media europea (25%) y también por debajo de la media mundial (24%) pero por delante de EE.UU. (20% de mujeres directivas) y del Reino Unido (19%).
Este 21% de españolas directivas contrasta con el hecho de que un 51% de los titulados superiores y también el 44% de la fuerza laboral de nuestro pais son mujeres.
En el mundo, se constata la mayor presencia de la mujer en puestos claves de las empresas en las economías emergentes y China (51% de mujeres en la dirección de las empresas). El sudeste asiático registra un 32% de mujeres directivas en sus empresas.
Los países BRIC (Brasil, Rusia, India y China) con un 28% de mujeres directivas superan a los países del G7 (más industrializados del mundo).
En Europa, Polonia y los países bálticos tienen porcentajes del 48% y adelantan a las economías europeas tradicionales. En el extremo opuesto se sitúa Japón, como es tradicional, en el que solo un 7% de sus cargos directivos son mujeres.
Volviendo a España, desciende el porcentaje de mujeres en la dirección como vimos y aumentan las empresas que no cuentan con ninguna mujer en su equipo directivo, alcanzando ya el 37% del total, cinco puntos más que el año pasado. La media europea es del 35%.
En las empresas del mercado continuo bursátil españolas, un 39% no cuenta con representación femenina en sus consejos de administración y la situación ha empeorado drásticamente ya que el porcentaje se ha incrementado 15 puntos desde el estudio de 2012. Dentro de las empresas cotizadas la situación es mejor si se analiza solo las empresas del IBEX 35, donde el porcentaje de reducción baja un 12%.
Sin embargo las mujeres siguen siendo solo el 13% del total de miembros de consejos de administración en el selectivo español. El porcentaje es mucho menor en lo más alto de las cúpulas ejecutivas: en las 35 empresas del IBEX sólo hay una consejera delegada y dos presidentas.
La mayoría de las empresas españolas (un 63%) se opone al establecimiento de cuotas obligatorias de presencia femenina en los consejos de administración. En la eurozona la media de las empresas que rechazan esta cuota es del 55%, con paises como Alemania en el que sube esta proporción hasta un 66%. Es en los países emergentes donde se acepta mayoritariamente esta política. En Turquía y China el apoyo supera el 70% y una media del 60% de empresarios latinoamericanos está de acuerdo con las cuotas obligatorias.
En España el rechazo de la regulación externa en esta materia no va acompañado por un esfuerzo de autoregulación. Solo un 5% de las empresas españolas cuenta con planes específicos para incorporar o promover mujeres a su cúpula directiva.
Estas medidas de autoregulación son claramente insuficientes. La UE calcula que a este ritmo se tardarían mas de 40 años en alcanzar el equilibrio de sexos en los consejos de administración.
La mayor flexibilidad laboral no equivale a mayor acceso a cargos directivos. De hecho al ser utilizada esta flexibilidad de forma mayoritaria por la mujer supone que su carrera profesional se supedita a la del hombre.
El Índice de Salud Empresarial de McKinsey reveló que, de cada 100 empresas, aquellas que contaban con 3 o más mujeres en altos cargos obtenían un índice más alto que el resto.
En la misma línea otro informe concluyó que la proporción media de mujeres directivas era de 7,1% en el grupo de las mejores empresas y del 3,1% en las peores compañías. En empresas recién creadas con 5 o más mujeres en su dirección, el 61% tuvieron éxito y solo un 39% fracasaron.
En el análisis de la evolución de los resultados de las empresas del Fortune 500, entre 2004 y 2008, las compañías con mayor número de mujeres en sus consejos de Administración superaron a aquellas con menor número de mujeres en un 16% de ventas y un 26% de retorno de la inversión.