No es un tópico decir que los trabajadores se "llevan" trabajo de sus empresas a casa después de su jornada laboral, o que la esfera de la empresa acaba inundando la vida personal y familiar y que los profesionales no pueden desconectar.
Por este motivo, Randstad ha llevado a cabo un análisis internacional sobre qué porcentaje de empleados trabaja fuera de su horario estipulado y qué expectativa tiene la empresa sobre el horario y disponibilidad del trabajo de sus empleados, a través de 14.779 encuestas a trabajadores de 32 países.
El 39% de profesionales afirma que su empresa espera de él disponibilidad absoluta en su puesto de trabajo. Esta cifra varía entre el 64% de los chinos o el 61% de los indios, de los que se espera disponibilidad las 24 horas del día, hasta el 22% de los daneses y el 23% de los suecos.
Es interesante profundizar como se solapan o desaparecen las fronteras entre las esferas laboral, personal y familiar. Las nuevas tecnologías y su introducción permiten una conectividad total en cualquier lugar, más allá del puesto de trabajo. Esto provoca que en muchos casos los empleados decidan continuar con sus tareas laborales fuera de su horario. En concreto según el estudio Randstad, un 56% de los empleados reconoce que trabaja en su tiempo personal..
En el caso español los datos dicen que, en su tiempo de ocio, un 64% de empleados reconoce que realiza tareas laborales, lo que supone 8 puntos por encima de la media.
Esta "intromisión" de la esfera laboral en la personal y familiar está directamente relacionada con el uso de la tecnología que ofrece la posibilidad de estar accesible y conectado las 24 horas del día y difumina la línea que separa el ámbito laboral del privado. El 65% de los profesionales afirma que recibe emails o llamadas telefónicas fuera de su horario de trabajo. En España esta cifra es ligeramente superior a la media, con un 68% de consultados que afirma recibirlos no estándo en su puesto de trabajo.
Los profesionales alargan su jornada no solo por encima de su horario, sino incluso de lo que la empresa espera que hagan en su ámbito personal. Es evidente la falta de comunicación entre empresa y trabajador, que no conjugan expectativas en cuanto a horario y tareas, pero también un aumento de la cultura del compromiso, ya que se acepta que es hora de realizar un mayor esfuerzo.
De media los empleados trabajan 18 puntos más de lo que su empresa cree, mientras en España este porcentaje aumenta a 24 puntos. Una vez más los españoles muestran su capacidad de compromiso ante el empleo escaso, muy por encima de las expectativas de su empresa.
Es llamativo que los holandeses trabajan desde su casa menos de lo que sus empresas esperan de ellos en su horario personal. Otra conclusión es que a mayor número de emails o llamadas fuera de horario, más tiempo familiar utilizado para tareas laborales y la concurrencia entre este uso empresarial y la realización de tareas personales en su trabajo.