El Consejo de Administración ha pospuesto la decisión de volver a emitir en onda corta a la reunión de este órgano de primeros de diciembre a petición del presidente de la Corporación para tener más tiempo para tomar una decisión.
Para UGT en CRTVE este aplazamiento es un síntoma de la falta de voluntad del presidente para abordar y solucionar el problema, optando por ganar tiempo en espera de una salida que nos tememos que pase por privar a la sociedad de este medio de comunicación.
El presidente se equivoca, porque esta defensa de la Onda Corta no se va a relajar, sino todo lo contrario. UGT en CRTVE, sindicato que viene realizando una lucha feroz de la Onda Corta desde RTVE y que lo viene haciendo por ser este medio un servicio público esencial, por lo que representa para sus más de diez millones de radioescuchas en todo el mundo (según la BBC), no va a aflojar un ápice en su esfuerzo de dar a conocer este problema y denunciarlo a la sociedad, sino más bien todo lo contrario.
Exigimos una solución YA, sin más dilaciones, para poner de nuevo en marcha Noblejas y devolver la onda corta a sus oyentes. Noblejas es mucho más que el Centro Emisor de la Onda Corta, hoy es el referente de lo que se quiere hacer con esta empresa, de hasta qué punto se quiere pervertir nuestro compromiso con el servicio público.
El presidente pide tiempo para no quedar pillado por una ola que lo puede dejar muy tocado, la de una onda corta borrada del mapa a pesar las peticiones del BNG y del PSOE, de las protestas del propio Partido Popular gallego, que ha puesto el grito en el cielo, e incluso del Presidente de la Xunta, a pesar de la demanda de asociaciones de mercantes y pesqueros, de cooperantes y ONGs, que les ha llevado a constituirse en una Plataforma en Defensa de la Onda Corta en Radio Exterior de España, que crece día a día y en la que UGT está también integrada.
El plan de sostenibilidad y mejora de la eficacia presentado al Consejo, en el que se conforma como punto fundamental la defensa del servicio público que debe y hace RTVE, jamás será creíble si se cierra un servicio público tan esencial y necesario como es la Onda Corta. Pero ¿Cuánto cuesta la Onda Corta? ¿Cuánto ahorramos a lo largo de un año dejando en silencio a mercantes, pescadores, misioneros, cooperantes y emigrantes, entre otros? Pues durante todo una año cuesta lo mismo que un único pase de una película de estreno americano, cuesta lo mismo que una noche de prime time de La1. Pero parece ser un precio muy alto para la dirección de la Corporación, para ellos vale menos que eso el servicio público que debe y hace RTVE, para ellos es demasiado dinero para invertirlo en mantener el único hilo de información posible para colectivos tan sensibles y que tanto necesitan de este medio, para mantener el vínculo con nuestros emigrantes y con muchos ciudadanos extranjeros que viven en zonas donde sólo pueden informarse de nuestro país gracias a la Onda Corta.