A pesar de tener beneficios y tras otro expediente de regulación de empleo llevado a cabo por McGraw-Hill en 2009, la pésima gestión de la actual Dirección de la Empresa y su descapitalización tras la venta a Apollo Global Management por parte de la anterior Dirección, lleva a la Editorial a un nuevo expediente de regulación de empleo.
El Comité de Empresa, que ha venido realizando un estrecho seguimiento a la gestión de la actual Dirección, llevándola a la Inspección de Trabajo y ante expertos financieros a lo largo de 2013, no ha podido evitar esta situación. La editorial McGraw-Hill no es nueva en estas prácticas, que desde hace ya tiempo viene aplicando sistemáticamente, y va en la misma línea de Apollo Global Management, empresa de capital riesgo, con interés puramente especulativo.
Sufrimos la fusión de ambas empresas multinacionales, reducción de plantilla continuadamente, EREs, modificaciones sustanciales de las condiciones laborales, de forma unilateral, persecución sindical y todo tipo de agresiones que ha posibilitado la última Reforma Laboral ante las que debemos reaccionar.