Hoy, 22 de febrero, se celebra en España el Día de la Igualdad Salarial, y la Secretaria para la Igualdad de UGT, Almudena Fontecha, ha aprovechado esta fecha para presentar un informe del sindicato sobre desigualdades salariales titulado Igual retribución por trabajo de igual valor, confeccionado a partir de datos del INE. Según este informe, durante los dos últimos años, la diferencia salarial entre mujeres y hombres en nuestro país se ha mantenido casi invariable situándose en torno al 22%.
La persistencia de estas diferencias ponen de manifiesto las escasas medidas puestas en marcha para combatir esta situación, por ello, UGT insiste en demandar de los poderes públicos un mayor compromiso con la eliminación de estas diferencias.
La Secretaria para la Igualdad de UGT, Almudena Fontecha ha recordado que las desigualdades salariales no sólo se manifiestan en la retribución sino que se observan también en otros factores como la segregación ocupacional, la temporalidad en la contratación, la jornada a tiempo parcial, las diferencias en la promoción profesional o las reducciones de jornada por cuidado familiar, entre otros.
Indicadores que reflejan la situación de las mujeres en el mercado laboral, y que, a su vez, se traducen en una menor percepción de retribuciones salariales.
Fontecha ha explicado que los datos del informe revelan una primera conclusión, y es que "las mujeres perciben menor salario cuando trabajan, menor prestación por desempleo cuando están en el paro y acceden a menor pensión cuando se jubilan". Aunque en nuestro país "somos más mujeres trabajando, no por ello, somos más iguales" ha añadido.
Para la Secretaria para la Igualdad de UGT, la nueva reforma laboral aprobada por el Gobierno no va a contribuir estas situaciones de desigualdad y no va a hacer otra cosa que agravar la situación.
De hecho, ha manifestado, de forma indirecta, "se le ha dado una patada a la aplicación de la Ley de Igualdad", fundamentalmente a través de la posibilidad de descuelgue sobre lo pactado que se les ofrece a los empresarios y que pueden usar para cambiar el salarios, la jornada e incluso la categoría profesional.
Almudena Fontecha ha mostrado su preocupación porque la crisis haya hecho invisible la situación de las mujeres en el mercado de trabajo, de manera que no se tome consciencia de ello ni se busque solución.
Fontecha ha explicado que "algunos pueden pensar que el paro de las mujeres es algo estructural, un mal endémico de la sociedad mientras que el de los hombres es coyuntural y es al que hay que dar soluciones" sin caer en la cuenta de que las mujeres han llegado al mercado laboral con vocación de permanencia, y cualquier solución que se plantee, tendrá que contar con ellas".